El excampeón Timothy Bradley no se quedó callado al comentar las acciones de los boxeadores en una de las peleas del torneo del 23 de diciembre en Arabia Saudita. Nos referimos a la sorprendente victoria de Daniel Dubois sobre Jarrell Miller.
"Esta fue una pelea entre un tramposo y un debilucho. Yo me preguntaba: "¿Quién ganará, el tramposo o el debilucho?"
Y cuando reflexioné sobre ello, concluí que el debilucho ganaría la victoria, porque el tramposo debe recurrir a las trampas. Tal vez "debilucho" suene duro, pero, ¿qué más puedo decir?
Miller es gordo y perezoso. Pesando más de 150 kg, le gusta recurrir al dopaje y siempre busca el atajo. No tenía ni una pizca de posibilidades de ganar.
Jarrell nunca puso en aprietos a Dubois recordándole sus fracasos anteriores. Al menos lo intentó, pero no pudo aguantar el ritmo. Dubois no tiene nada que hacer en la categoría de peso pesado. Solo te lo estoy comunicando tal como es. Miller resultó ser el oponente ideal para él", afirmó Bradley.
Dubois logró detener a Miller a tan solo 10 segundos del final del combate.