Anthony Yarde es uno de los mejores oponentes posibles para David Benavidez en esta etapa de su carrera. El estadounidense debutó en el peso semipesado en el verano de 2024 y desde entonces se ha enfrentado a Oleksandr Gvozdyk y David Morrell.

Ambas peleas fueron excelentes. El combate con Morrell fue dinámico y lleno de acción. Sin embargo, estilísticamente, Yarde —con su voluntad de atacar, de responder con golpes duros y con su fortaleza física— es exactamente el tipo de rival que Benavidez necesita ahora.

Benavidez es un boxeador ofensivo constante. Avanza sin parar, lanza una enorme cantidad de golpes y combina ataques a la cabeza y al cuerpo. Es un problema serio para cualquier rival.

Yarde no es tan técnico como Morrell, pero posee sus propias virtudes. Es paciente bajo presión, sabe entrar en los intercambios y, aunque no es un noqueador de un solo golpe, su poder es real.

Además, Yarde atraviesa un excelente momento. Desde 2023 acumula cuatro peleas, todas ganadas, dos de ellas antes del límite.

Mientras tanto, Benavidez aún no ha conseguido un nocaut en 175 libras. La duda sobre si su pegada se mantiene ante rivales más pesados sigue sin respuesta. No pudo detener ni a Gvozdyk ni a Morrell. Ganó por ritmo, volumen e insistencia, pero no por potencia.

Yarde será una nueva pieza clave en este rompecabezas. Ayudará a determinar si Benavidez puede realmente desgastar y quebrar a oponentes más grandes. Yarde ha enfrentado a la élite del peso semipesado: Sergey Kovalev en 2019, Artur Beterbiev en 2023, Lyndon Arthur y otros.

Benavidez tiene solo 28 años, seis menos que Yarde. Ambos tienen experiencia, pero la clave no es la cantidad de peleas.

Lo importante es que Benavidez aún es un debutante en el peso semipesado. Todavía no ha demostrado si su fuerza puede dominar a rivales más grandes. Venció a Gvozdyk y Morrell por ritmo y presión, pero no los pudo definir antes del límite.

Yarde ayudará a responder esa pregunta.

Las estadísticas indican que esta pelea será muy dinámica.

Benavidez y Yarde lanzan prácticamente la misma cantidad de golpes. Benavidez tiene una ligera ventaja tanto en volumen como en precisión.

La mayor diferencia está en los golpes de poder:

Benavidez lanza alrededor de 310 por pelea frente a 230 de Yarde, y aun así mantiene mejor precisión (27% vs 26%).

La actividad de Benavidez en 175 lb no ha sido ideal —debutó en 2024 y peleó solo una vez—. Pero en 2025 ambos subirán al ring por segunda vez.

Yarde venció a Lyndon Arthur en una pelea dura y movida, mientras Benavidez ofreció una de las mejores peleas del año contra Morrell.

Ambos tienen porcentajes sólidos de KO, pero ninguno es un noqueador puro.

Benavidez desgasta a los rivales con volumen y combinaciones. Yarde es fuerte y atlético, pero tampoco tiene un poder devastador.

Esto sugiere que veremos muchos intercambios prolongados.

Kovalev y Beterbiev detuvieron a Yarde, pero eso no significa que tenga mala quijada. Es resistente y competitivo incluso bajo fuego.

Benavidez tampoco es de acero puro. Morrell conectó golpes claros. Pero la habilidad de Benavidez está en limitar riesgos incluso al atacar, evitando que sus rivales pongan a prueba su quijada continuamente.

Benavidez ha boxeado fuera de EE. UU. en México. Yarde ha peleado fuera del Reino Unido un par de veces. Ninguno ha competido en Arabia Saudita.

Adaptarse al clima y al huso horario será clave. Factores así han influido muchas veces en la resistencia y rendimiento de los boxeadores.

Benavidez llega como favorito y campeón. Dimitry Bivol rechazó enfrentarlo, lo que permitió a Benavidez conseguir el título. Ahora busca grandes nombres y quiere dominar esta división durante años.

Yarde ha enfrentado a rivales peligrosos, pero nunca uno con el ritmo de Benavidez. Esto puede ser determinante.

El mayor problema histórico de Yarde es la resistencia. Contra Beterbiev comenzó bien, pero se desinfló en los asaltos avanzados.

Yarde cree que su poder puede hacer que Benavidez dude y reduzca la presión. Si lo logra, una sorpresa es posible.

Pero si Benavidez lo arrastra a los asaltos tardíos sin bajar de nivel, los problemas serán del británico.